Estrella espera en el 2008 dominicanos puedan diferenciar lo bueno y lo malo

NOTA DE PRENSA.

NUEVA YORK. Al desear desde la ciudad de Nueva York salud y prosperidad al pueblo dominicano, el candidato presidencial de la Cuarta Vía, Eduardo Estrella, hizo un llamado para que el nuevo año 2008 marque el punto de arranque de un esfuerzo común de todos los dominicanos y dominicanas en la búsqueda del desarrollo colectivo que como nación nos merecemos, y dijo que esa meta sólo será alcanzable si se anteponen la unidad familiar, la honestidad y la solidaridad como ejes fundamentales de este propósito.

Tras elevar una oración a Dios por el bienestar de todo el pueblo dominicano, y en especial para las clases más necesitadas, Eduardo consideró que la llegada del 2008 significa una gran oportunidad para que los dominicanos puedan diferenciar lo bueno de lo malo, en donde los valores cristianos deberán ocupar un sitial fundamental en las decisiones de todo aquel que aspire a un futuro más esperanzador para la colectividad nacional.

Dijo que la búsqueda del desarrollo colectivo del país debe convertirse en la aspiración principal de todo aquel que se sienta comprometido con el futuro de una nación que continuará sumergida en el atraso y el subdesarrollo si cada quien continúa luchando por su progreso individual.

Eduardo Estrella se mostró confiado en que el 2008 será un año clave para que los dominicanos entiendan la necesidad de motorizar los cambios que garanticen un futuro mejor para sus hijos, por lo que comenzarán dotando al país de un gobierno y de unas autoridades conscientes de que el desarrollo sólo será posible a través de un real y necesario régimen de austeridad, y que promocionen un gran compromiso de solidaridad de las clases pudientes con las grandes mayorías de dominicanos que permanecen desprovistas de las cosas más elementales para una subsistencia digna.

El candidato presidencial de la Cuarta Vía, quien desde hoy desarrollará un programa de actividades en Nueva York y Nueva Jersey, consideró que además de dotarse de autoridades responsables, los dominicanos deben de asumir el nuevo año con un gran solidaridad y creatividad, a la vez que promocionan un gran espíritu de dominicanidad entre sus hijos para que puedan ser en el futuro hombres y mujeres de bien.

Eduardo reiteró que la unidad familiar debe constituir el eje principal del accionar para la construcción de una mejor nación, un país de hombres y mujeres leales, con grandes valores cristianos.