La ex vicepresidenta de la República Milagros Ortiz Bosch aseguró que el tráfico y consuno de drogas en el país tiene un impacto multiplicador que potencia la delincuencia, la violencia, la insalubridad física y mental, fallas educativas y en general en el cuadro de pobreza y descomposición de la familia y la ética pública que afectan hoy a la sociedad dominicana.
“El tremendo impacto del consumo y tráfico de drogas en nuestro país y la condición de la isla puente para el narcotráfico internacional”, expuso, “no puede continuar como un tema que tratamos con miedos y reservas sino que debemos abordarlo de manera seria y abierta y unificando acciones e iniciativas para ponerle un alto y empezar a revertirlo, tratándolo como un tema crucial de la agenda nacional”.
Para Ortiz Bosch es “preocupante en extremo” que recientes declaraciones del mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreiras, sobre la envergadura y los alcances del consumo y el tráfico de estupefacientes no hayan estremecido al país y, por el contrario, han pasado prácticamente desapercibidos.
La ex vicemandataria y pasada secretaria de Estado de Educación formuló sus opiniones sobre el tema en “Milagros desde la Z”, el espacio radial de formación de conciencia ciudadana que conduce de lunes a viernes por la emisora Z-101 FM.
Dijo que según han establecido autoridades y especialistas el consumo y tráfico de drogas local se alimenta de los pagos en especie que se da a quienes sirven al narcotráfico internacional las funciones de mulas o participan en la llegada de drogas al país y su envío a Estados Unidos y Europa.
“Pero conforme nos enteramos las frecuentes noticias de la cantidad de personas vinculadas al consumo o el tráfico de drogas es evidente que el fenómeno ha estado creciendo sustancialmente”, señaló, “al extremo de que una federación choferil reveló que una prueba practicada a su personal evidenció que un importante porcentaje de su personal que sirve al transporte colectivo consume estupefacientes, y queda la pregunta de si no se estará usando a individuos de ese medio para la distribución de narcóticos, lo cual sería aún más grave”.
Tal como ha advertido el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, general Ramírez Ferreiras, este disparo del tráfico y consumo de drogas, que ya está afectando medularmente a nuestra sociedad, ocurre sin que a nivel del conjunto social tengamos conciencia ni nos estemos preparando para revertirlo desde la unidad familiar a los más encumbrados y diferenciados sectores, sostiene Ortiz Bosch.
Abogó porque Estados Unidos preste mayor asistencia al país en materia de vigilancia aérea y marítima al país, ya que esa poderosa nación cuenta con recursos tecnológicos que la República Dominicana no tiene disponibilidad económica para abastecerse en la cuantía necesaria para proteger el aire y las costas nacionales.
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