Manifiesto al Pueblo Dominicano
Dr. Héctor Valencia
El Partido de la Liberación Dominicana (P.L.D.), nace en el período de mayor irrespeto a la vida humana y a la libertad de expresión; jamás vivido en el país, después de la muerte de Trujillo.
El Profesor Juan Bosch, fundador del P.R.D. y del P.L.D., se había visto obligado a retirar su nominación presidencial, producto del atropello a expresar sus ideas con libertad.
Que se sufran hoy, las mismas cosas de que fue víctima en épocas anteriores la nación dominicana; y peor, de parte de un gobierno nacido con ese historial de lucha, más que frustración, produce vergüenza!
Después de firmado un contrato con la empresa “World sign”, para una valla publicitaria por 10 meses; nos reunimos con el diseñador gráfico y se le explicó con exactitud lo que queríamos. (Hasta aquí, todo bien).
Una vez aprobado el trabajo, se acordó (simple!), de que en dos o tres días, el mensaje estaría publicado.
Era un acuerdo formal, rutinario y explícito, entre un cliente y una empresa; ambos estuvieron de acuerdo y satisfechos.
Obviamente, nos encontrábamos en el país; en copas de espera, de los resultados de lo arriba señalado.
24 horas después, una llamada del Gerente de Ventas, cambió el sentir de nuestro viaje; que hasta el momento, era de plena satisfacción.
El nos comunicó que el “mensaje de la valla, no fue aprobado por la comisión encargada”.
A seguidas agregó: “No se puede publicar nada en contra del Presidente de la República.
Pertenecemos a una agrupación de empresas publicitarias de vallas, cuya directiva es la que aprueba o rechaza los mensajes; y en ella hay altos dirigentes del P.L.D., que dijeron que bajo ninguna circunstancias aprobarían un mensaje en contra de Leonel Fernández”.
Soy un medico; diariamente establezco relaciones de trabajo y negocios con empresas y personas que mercadean y promueven productos y servicios.
Resido en un país libre, donde lo que piensas se respeta y el móvil de tus ideas, siempre que esté en el marco de la ley, será un mecanismo seguro, de tu libre expresión.
Quizás, todo esto, de repente, me hizo sentir en “Macondo”; donde, la realidad y la ficción se mezclan con lo ridículo y lo extravagante.
Realmente, lamento las secuelas tiránicas que sobreviven en nuestra nación.
Que esto suceda en un país, donde hipócritamente, su presidente se vende y codea entre demócratas y gente de avanzada, resulta más patético.
Lamento enormemente que por ahí anden las cosas.
Y lamento más, que lo que pudo haber sido la brillante carrera de un presidente, termine como se augura, en un “NO” rotundo a sus intenciones de continuar; y se quedará solo, donde siempre se quedan los que traicionan la libre expresión.
Hector A. Valencia MD FAAP
miércoles, septiembre 19, 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario