Ségolène Royal intenta recuperar la izquierda

A una semana de la primera vuelta, Sarkozy gana en los sondeos

De Cinco Días.com

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La recta final de las elecciones presidenciales francesas marca de nuevo la oposición entre izquierda y derecha. La candidata socialista Ségolène Royal, a quien los últimos sondeos dejan en segunda posición detrás de Nicolas Sarkozy en la primera vuelta -que se realizará el próximo domingo 22 de abril-, intenta recuperar los tradicionales electores de izquierda.

Y es que el candidato conservador se ha impuesto en todos los sondeos desde el inicio de la campaña. El último le da ganador con el 30% de los votos. Más allá de las encuestas, la realidad es que Sarkozy ha sabido situarse en el centro del debate en todo momento. Incluso protagoniza la retahíla de libros políticos que asaltan las librerías. Su Testimonio ha vendido 262.000 ejemplares, por delante de Proyecto de esperanza de François Bayrou (28.849) y de Ahora de Ségolène Royal, del que se desconoce el número de ejemplares vendidos.

Movilizar al electorado

De ahí que, a una semana del primer gran examen, que dejará en liza sólo dos candidatos de cara al 6 de mayo, la socialista luche por movilizar a su electorado. Los analistas apuntaban la necesidad de la socialista de recuperar los temas económicos y sociales, el poder adquisitivo o la precariedad laboral, en un guiño a las expectativas de las clases populares.

El giro a la izquierda llegó el viernes. En un mitin en la ciudad de Metz, al norte de Francia, Royal intentó ensalzar su 'fuerza serena' frente a 'la brutalidad' de su oponente conservador, a quien hasta ahora no había atacado tan frontalmente. 'Yo represento la fuerza serena de un cambio eficaz, frente a la brutalidad agitada de Nicolas Sarkozy'.

Sus aires de independencia frente a los barones socialistas quedaron ese día de nuevo humillados. Si algo ha fallado en su campaña, ha sido precisamente la falta de apoyo explícito de los pesos pesados del PSF. La propuesta de Michel Rocard, antiguo primer ministro socialista, de aliarse con el centrista Bayrou para frenar a Sarkozy en la primera vuelta tuvo el efecto de una bomba entre las filas socialistas, que de nuevo mostraron su fractura. El secretario general del partido y compañero de Royal, François Hollande, saltó a la palestra pública para precisar que 'ninguna alianza es concebible entre la izquierda y una parte de la derecha'.

Mientras, Sarkozy emplea los últimos días de campaña en volver a sus inicios de sembrar la confusión sobre la orientación de su política. Royal acusa a su partido de aliarse por debajo de la mesa con el candidato de extrema derecha, Jean-Marie Le Pen, tras haber propuesto el sistema proporcional de votos en las legislativas, lo que supondría la presencia de diputados del Frente Nacional.

En su mitin en Toulouse, donde el Partido Socialista dedica tradicionalmente su última arenga a los electores, el candidato conservador fustigó a la izquierda que 'ha tomado gusto a los privilegios, a la que no le gusta la nación, que entre Jules Ferry y Mayo del 68, eligió Mayo del 68'. Su 'espíritu abierto', y sus referencias a tradicionales personajes de izquierda intentan alejarse de Le Pen, quien alterna alabanzas y arañazos hacia Sarkozy.

La única preocupación compartida es el nivel de indecisión. Los candidatos intentan convencer al 42% del último sondeo, multiplicando sus apariciones. De llegar a la segunda vuelta, Sarkozy ganaría a Royal por 54% a 46%. Si el 6 de mayo opusiera al candidato conservador a François Bayrou, el centrista ganaría con el 53% contra 47% para Sarkozy.

Los aspirantes Su programa básico

Nicolas Sarkozy

Empleo Su lema 'trabajar más para ganar más' y su ataque a la ley de 35 horas de la izquierda, determina la idea de que la actividad económica genera el crecimiento y éste crea empleo. Favorecerá exoneraciones fiscales sobre las horas extra, que se pagarán un 25% más.

Deuda y fiscalidad Reducirá la deuda pública por debajo del 60% del PIB en 2012 y limitará la progresión del gasto público a un 1,8%. Apuesta por reducir los impuestos obligatorios en un 4% del PIB en diez años.

Vivienda Pretende extender la propiedad a todos los franceses. Toda construcción nueva deberá contar un porcentaje -por determinar- a viviendas sociales

Inmigracion Su lema, 'inmigración elegida, no sufrida', endurece las condiciones de agrupación familiar, modelo de inmigración en Francia. Requerirá para los familiares tener techo, trabajo y saber francés antes de pisar suelo galo. El interés de Francia será atraer a la inmigración cualificada.

Ségolène Royal

Empleo La candidata socialista ha hecho del empleo prioridad, con la creación de 500.000 nuevos puestos. Habrá exoneraciones fiscales según tipos de contrato. La jornada de 35 horas será negociada por los agentes sociales.

Deuda y fiscalidad Estabilizará los impuestos obligatorios (44% del PIB), sin que esto sea incompatible con la reducción de la deuda pública. El adelgazamiento del Estado figura entre sus medidas.

Vivienda Los inquilinos de las viviendas sociales serán propietarios tras 15 años de ocupación. Creará hasta 120.000 viviendas protegidas anuales para alquiler y propone que el Estado venda sus terrenos y edificios por la mitad de su precio a los municipios para levantar viviendas sociales.

Inmigración Restaurará la regularización de inmigrantes tras diez años de residencia en Francia, suprimida por Sarkozy. Preconiza una regularización según el tiempo de residencia o la escolarización.

François Bayrou

Empleo El candidato centrista proclama su modelo de economía social. Sus medidas se dirigen principalmente a las pequeñas y medianas empresas. Prevé la exoneración de impuestos a las empresas por la creación de dos empleos nuevos. El tiempo de trabajo será negociado.

Deuda y fiscalidad La reducción de la deuda pública es la prioridad del candidato centrista. Los impuestos permanecerán en el nivel actual.

Vivienda Se muestra a favor de suprimir la fianza previa al alquiler para aquellas familias que ocupan viviendas sociales. Los prefectos podrán ostentar el poder de otorgar permisos de construcción en aquellos municipios que no favorecen la construcción de viviendas sociales.

Inmigración La realidad económica del país debe dictar la capacidad de acogida de inmigrantes. Bayrou apuesta por una política de cooperación europea y de diálogo con los países emisores de inmigrantes.