SANTIAGO DE CHILE (AP y AFP).- El secretario general de la Organización de los Estados Americanos, OEA, José Miguel Insulza, se manifestó partidario de eliminar la norma que excluyó a Cuba de ese organismo.
“La resolución del (año) 62 es un obstáculo que sería bueno remover para iniciar un diálogo en el marco multilateral con Cuba”, afirmó Insulza a la prensa el viernes a su llegada al país.
El secretario general de la OEA, de nacionalidad chilena, tras reunirse con el canciller Alejandro Foxley señaló que en los países de la región con los que ha conversado el tema “en general, hay una cierta disposición” a considerar al término de la exclusión cubana.
Cuba fue marginada del organismo en 1962 a proposición de Estados Unidos por su adhesión al marxismo. Insulza reconoció que el retorno de Cuba a la OEA “no será una cosa inmediata, son 50 años de ausencia”.
El propio gobierno cubano tampoco parece dispuesto a volver a integrar el organismo continental, según lo manifestó hace unos meses el presidente Raúl Castro.
El canciller Foxley no expresó un respaldo explícito a la gestión de Insulza, pero señaló que “estamos trabajando muy concordadamente con el secretario general y es un tema que vamos a acompañar en su desarrollo, que está recién en sus primeros pasos”.
"Yo soy partidario de revocar la resolución de 1962 por la cual se suspendió a Cuba del sistema interamericano", dijo en conferencia de prensa Insulza, que viajó a Montevideo para suscribir un acuerdo de cooperación energética.
Calificó de "antigua" a esa resolución que habla "de la incompatibilidad de los gobiernos marxistas-leninistas con otras formas de gobierno y del eje chino-soviético", por lo que "no tiene ningun sentido mantenerla".
"Soy partidario de un diálogo con Cuba posterior a la revocación de esa resolución, y espero además que los países que todavía no tienen relaciones con Cuba las vayan normalizando", agregó Insulza, quien aclaró que "esto no es un juicio sobre el régimen cubano ni mucho menos" sino "simplemente hacer cuentas con la realidad".
"De 34 miembros de la OEA, 31 tienen relaciones diplomáticas normales con Cuba, uno las tiene solamente consulares y dos no las tienen", dijo Insulza, que el viernes sigue su gira por Chile, para luego ir a Argentina y Brasil.
"Es un poco absurdo tener una organización (...en la que) solo tres (miembros) las tienen suspendidas (las relaciones con Cuba) por cosas que pasaron hace 50 años", insitió y agregó que en caso de una eventual negociación para el reingreso de Cuba "cumpliremos" el "rol que nos asignen".
Respecto a las diferencias ideológicas entre los países de la región, Insulza afirmó que "en períodos democráticos ha habido bastante diversidad y esta no es una situación distinta".
Destacó que en la Cumbre de las Américas que se celebrará en Trinidad y Tobago del 17 al 19 de abril "los 34 que se van a sentar en la mesa (...) han sido elegidos de manera democrática, plenamente democrática. No hay ahí nadie que esté cuestionado, no hay nadie que haya llegado (al poder) por otra vía".
Asimismo, indicó que "compartimos todos (...) una cierta convicción de que es un momento de volver a dar al Estado (...) el papel que tiene" porque "la visión de que el Estado es parte del problema y no parte de la solución ya no se da en nuestra región".
Insulza subrayó también que en América Latina "tenemos una situación de paz. Han habido problemas entre algunos países, los conocemos bien (Colombia-Ecuador-Venezuela, Bolivia-Chile, Argentina-Uruguay), pero mirado en la perspectiva global, este es el continente más pacífico del mundo".
Indicó que hay "problemas comunes", como la desigualdad, la discriminación y la pobreza, y admitió que "problemas ideológicos por cierto que los hay".
"A veces tenemos debates agitados, y a veces se dicen cosas que no se deberían decir, pero en general yo noto un ambiente, una disposición a ponerse de acuerdo más que a buscar" las diferencias, sentenció.